Breve presentación de la empresa (actividad, localización…):

SUTARGI es una sociedad anónima laboral sin ánimo de lucro dedicada desde 1992 a la inclusión socio-laboral de las personas con discapacidad y personas en riesgo de exclusión social a través de la formación, la inserción laboral, la intermediación y el acompañamiento.  De esta manera, SUTARGI impulsa una mejor sociedad presente y futura.

Sutargi tiene su sede social en el municipio de Belauntza de la comarca de Tolosaldea (Polígono Beotibar), y cuenta con dos ubicaciones propias en Alegia (Polígono Errotaldea y Polígono Bazurka).  Asimismo, y en colaboración con clientes estratégicos, desarrolla su actividad en otras zonas geográfica como Hernani, Usurbil, Ikaztegieta, Legorreta.

SUTARGI es el patrono fundacional de DEKOSOCIAL FUNDAZIOA, cuya finalidad es potenciar la inserción laboral de personas en situación o riesgo de exclusión social.

¿Cómo y cuándo nació el proyecto? ¿Qué os animó a orientar vuestra actividad a la economía circular?

Sutargi nació por la visión de padres y madres de personas con discapacidad que estaban convencidos de que sus hijos e hijas debían tener un futuro, debían contar con la oportunidad de desarrollar sus capacidades y elegir un camino de crecimiento.  Nuestro origen siempre ha estado ligado a la Asociación Ortzadar (cuya finalidad es aportar apoyo social y alternativas al tiempo libre de las personas con discapacidad) y Ortzadar Ikastetxea (escuela de segunda oportunidad).  Esta cercanía entre ambas organizaciones puso de manifiesto la necesidad de abordar una tercera vertiente: la laboral, y de allí surgió Sutargi para ofrecer oportunidades sociolaborales a las personas con discapacidad.  Formlamente hablando, SUTARGI se creó el 26 de febrero de 1992, por lo que este mes cumplimos 32 años de vida.

En el tema de economía circular comenzaos en 2018 en nuestra ubicación de Lasarte.  Iniciamos esta actividad con el apoyo de la Diputación de Gipuzkoa para mejorar la empleabilidad de personas en riesgo de exclusión.  En aquel entonces poner en marcha una actividad responsable con el medio ambiente como parte de nuestra política de calidad.  Decidimos aprovechar pallets y maderas que podían ser considerados residuos. Y así empezamos fabricando productos muy pequeños como accesorios de oficina hasta llegar a nuestra situación actual en la que tenemos la capacidad de fabricar mobiliario con esa materia prima. 

Siguiendo esta línea de trabajo, en 2023 hemos comenzado con la elaboración de los productos de uso personal a partir de los residuos de telas provenientes de la fabricación de mobiliario.

Alrededor de estas actividades estamos generando todo este ecosistema; estamos colaborando con centros de formación profesional y poco a poco vamos a ir activando otro tipo de actividades, como talleres con niños en edad escolar para sensibilizarles de la importancia de la economía circular. Además, esos talleres serán dinamizados por las propias personas con discapacidad y en riesgo de exclusión que están en nuestro ecosistema. Así damos a conocer el trabajo que realizan y son capaces de transmitirlo a otras personas, trabajando en el ámbito de la inclusión: Apostar por la circularidad desde la inclusión.

¿Qué tipo de productos hacéis partiendo de la materia prima que utilizáis?

En la actualidad trabajamos con dos tipos de residuos: textil y madera.  Con la madera desarrollamos mobiliario (taburetes, mesas de trabajo, mesas auxiliares, bancos) accesorios de oficina (portalápices, soportes para ordenadores) y artículos funcionales para el hogar (percheros, jardineras).  Contamos con un catálogo con unas 12 referencias.  En el caso del textil fabricamos bolsas multiusos, portadocumentos, bandoleras; en total unas 14 referencias. 

Es importante señalar que suele ser habitual empresas que nos piden prototipos específicos con alguno de estos dos tipos de residuos.  Destaca el caso de Global Shaper, iniciativa del Foro Económico Mundial que une a jóvenes de entre 18 y 30 años para crear proyectos de impacto social.  Para su evento anual realizado en 2023 diseñamos y fabricamos productos a medida.

¿Cuál es el valor de vuestra organización como proyecto de economía circular? ¿Y cuál es el valor ambiental y social de vuestra organización?

Sutargi como proyecto es un excelente reflejo de la sostenibilidad desde la triple vertiente; es un caso de éxito en ese difícil equilibrio del que siempre hablamos.

• Dimensión social:
  • Ofrecemos espacios de desarrollo personal y profesional para nuestras personas basado en el trabajo en equipo, la transparencia, el compromiso, la excelencia y la igualdad.
  • Generamos puestos de trabajos estables y de calidad para todas las personas trabajadoras.
• Dimensión económica:
  • Apostamos por un modelo de empresa participada y con un modelo de negocio equilibrado y viable con capacidad de transformación del entorno.
• Dimensión medioambiental:
  • Ofrecemos productos a la sociedad ecosostenibles a partir de materias primas recicladas y/o reutilizadas cumpliendo con los más altos estándares de calidad.
  • Garantizamos un uso racional de todos los recursos en nuestras instalaciones.
  • Asesoramos a las empresas en la búsqueda del uso eficiente de sus recursos.

¿Qué importancia tiene el I+D+i en vuestra organización?

Sutargi ha sabido adaptarse a los cambios del entorno y eso es lo que le ha permitido contar hoy su historia después de 32 años de actividad ininterrumpida.  Desde siempre hemos dado prioridad a la innovación para generar nuevas oportunidades que nos permitan ofrecer mejores oportunidades a las personas de los colectivos con los que trabajamos.  Por lo tanto, buscamos el equilibrio entre la exploración y la explotación; ese enfoque de la empresa ambidiestra.  Trabajamos cada día para que ello sea una seña de identidad a nivel organizativo, y también a nivel personal.  Queremos que las personas innoven también en el marco de desarrollo profesional.

¿Cuáles han sido vuestros principales logros de estos años?

Durante estos 32 años de actividad hemos sido capaces de crear oportunidades para las personas a las que atendemos; oportunidades que les han permitido desarrollar su proyecto de vida.  Hemos conseguido que las personas se vayan desarrollando personal y profesionalmente y que nuestros itinerarios personalizados les ayuden a llevar una vida autónoma.  Esta labor de sensibilización y reconocimiento de las capacidades diversas de las personas ha sido una labor constante y creemos que hemos contribuido, junto con otras empresas sociales, a transformar progresivamente nuestra sociedad, y que seamos capaces de reconocer la diversidad como un valor.

Desde una visión más empresarial, SUTARGI ha conseguido certificaciones muy relevantes: ISO 9001, ISO 14.000, ISO 13.485 (en proceso) demostrando que somos buscamos la excelencia en todo lo que hacemos.

Pero estos logros y muchos más solo nos animan a seguir avanzando, a seguir creciendo con nuestras personas.  Por eso, 2023 ha marcado un punto de inflexión.  Empezamos período estratégico caracterizado por la puesta en marcha de un plan de transformación organizacional profundo: EKIN 2023-2025.

EKIN está centrado en la transformación cultural de la empresa bajo 3 vectores esenciales: empoderamiento de las personas, creación de entornos seguros de participación a través del juego, y posicionamiento de la empresa en el territorio como agente de cambio en relación con colectivos vulnerables.

¿Qué pensáis que es necesario para que la economía circular se consolide, en general; y en Gipuzkoa, ¿en particular?

No es una opción, es un imperativo.  Debemos cambiar profundamente nuestro esquema mental para ser más responsable con el uso de los recursos en general.  La respuesta a la pregunta es un SI rotundo y en mayúsculas. 

En Sutargi queremos ser responsables con el uso de los recursos y por eso estamos trabajando por introducir este cambio mental en la empresa.  Comenzamos con el uso de energías limpias, desarrollamos una nueva actividad económica a partir de los residuos de la madera y los textiles, como hemos comentado.  Además, hemos introducido un objetivo estratégico relacionado con hacer un uso racional de los recursos en su sentido más amplio, de forma tal que solo empleamos los recursos necesarios para la actividad de la que se trate.  Esta apuesta como empresa la trasladamos a nuestras personas para que reproduzcan estos comportamientos en su vida personal.  Somos responsable de dar ejemplo y debemos hacernos cargo de ello.